No?

•Entrada: # O52
•Playlist: Because of You - After School

•••About
De verdad, y lo estoy jurando: No tengo depresión. Se los digo a ustedes personas que no comentan mi blog, pero si me acosan con preguntas vía MSN. Tampoco estoy enamorada ni me han roto el corazón... Es sólo...No sé ...¿Una enfermedad? Como sea... Es mi blog, no se quejen.

~No?

Tus dedos se entrelazan con los mios de forma inesperada mientras caminamos rumbo a mi casa –Y no esque yo te lo haya pedido, más bien tuve que rendirme ante tu insistencia. Aun sigo pensado que estoy enferma, pero eso no me hace paralítica.- Siento que mi corazón acelera su ritmo, y por poco olvido como se respira. Inhalo, exhalo (y en ese orden), pero el aire parece no ser suficiente.

Quedan unas cuantas cuadras para llegar, y al paso que vamos no sé si lo lograré viva. Tu melódica risa llena mis oídos, y sinceramente no puedo concentrarme en la divertida aventura que me estas contando, porque tus blancos dientes, tus rosados labios y ese exquisito perfume que usas me tiene durmiendo sobre una nube, una muy suave.

Finalmente me dejas en la puerta de mi casa, sueltas mi mano (y no sé como explicarlo, pero sentí frío al instante) y con un beso en la mejilla me dices hasta mañana. Pero yo soy impaciente, y antes de que me de cuenta estoy recostada en mi cama con mi computadora en mi regazo, conectada al chat. Me escribes una infinidad de cosas, pero no leo ni la mitad, porque estoy más concentrada en mirar ese diminuto rectángulo en la pantalla, ese en el que apareces tú.

“¿Sabes? Creo que me gusta mucho…” Escribiste.

Y entonces reaccioné, sólo para darme cuenta que me habías estado hablando por horas acerca de tu compañera de puesto, esa que te pide siempre la tarea, esa que te copia en los exámenes y que me reemplaza de vez en cuando a la hora de almuerzo. Y me pregunto: ¿Por qué no me di cuenta antes? ¿Por qué siento este dolor en el pecho?

“Te quiero” Escribes antes de abandonar la conversación.

Yo no te respondo, sólo apago mi computadora y lloro en silencio. Y es que no logro entenderte. ¿Por qué me diste falsas esperanzas? ¿Por qué me dejaste vivir una mentira? (¿Por qué parecía tan real?)

¿Por qué entraste a mi vida si no planeabas quedarte?

~The End
Tienen que admitir que es muy realista. Típico que al niño que te gusta le gusta otra. OK, el problema no es ese... Sé que he estado escribiendo demasiado EMO (y no es que a mi me desagrade ese género...),y la verdad igual me está preocupando. Veremos si es que la próxima sale menos triste....

Sayuri

Miss You

•Entrada: # O51
•Playlist: Y - MBLAQ

•••About
No tengo depresión, es enserio. El hecho de que todas mis historias/cuentos/whatever sean del género Angst no significa que yo tenga algún trastorno psicológico.Bueno, y siguiendo con mi desafío personal (que pretendo terminar antes de que termine este año), les traigo otra tragedia u.ú

~Miss You

Nieve. Odio la nieve. Es fría, húmeda, blanca…

Camino por el parque, ese mismo parque por el que solíamos caminar el día entero. Es incríble como cambian las cosas. Yo solía sentarme frente a una laguna, por horas, sin hacer más que ver las nubes. En este mismo parque, me juraste que no me dejarías nunca. Algunos pensarán que soy ingénua, inocente, pero yo sé lo que soy: Una tonta. ¿Quén podría creerse una mentira como esa?

Me siento en esa banca, esa misma en la que tú me hacías compañía todos los días. Que ironía, cuando tu estabas yo amaba la nieve, amaba el invierno- y esque no se siente de la misma forma estar aquí sola, que estar en los brazos de alguien-, yo te amaba a ti. Pero ahora, pasan las horas y lo único que logro es llorar, sientiendo tanto frío que podría jurar que mis lágrimas se congelan al caer.

Te extraño.

Porque cuando tú estabas, el invierno no era tan húmedo, mis manos no se sentían frías, y la vida no era sólo blanca, era de colores.

~The End

Ammm, bueno, no me pregunten a donde se fue el príncipe de pacotilla de este relato, porque I don't have a clue. Y bueno, probablemente este mes se llene de entradas porque he estado trabajando en muchos otros cuentillos.

Sayuri